Las neuronas reciben y transmiten numerosas señales continuamente entre sí. Son células complejas, variables e impredecibles que forman una gran red.
El espacio entre ellas que llamamos sinapsis, por donde pasan las diferentes señales y estímulos con la ayuda de unas sustancias químicas llamadas neurotransmisores, tiene muchas posibilidades de activarse simultáneamente.
Así, las miles de millones de neuronas de todo el cuerpo humano forman lo que llamamos red neuronal. Las actividades del cuerpo como los calibres de las arterias o la contracción y relajación de un músculo se adaptan estrictamente a lo que requiera la actividad neuronal.
¿Qué es el dolor?
Existen muchos mitos entorno al dolor.
Cuando una persona siente dolor, es una proyección del funcionamiento de toda la red neuronal, que supera un umbral de relevancia y aparece en la conciencia.
El dolor nace de la valoración de la red neuronal de amenaza cumplida, actual o futura, de daño relevante en esa circunstancia, momento y lugar.
Cuando sentimos un aviso del organismo, quiere decir que hay una evaluación, una intención de implicarnos en esa evaluación concreta. No es necesario que exista un daño o lesión. Solo hace falta la valoración y el temor a que se produzca.
Todo es cuestión de muchas y pequeñísimas señales eléctricas, porque las neuronas y el dolor forman parte del sistema defensivo del organismo.
Dolor en la infancia
“La culturización del cerebro empieza en la infancia, donde hay más miedo y falta de información experta”
Arturo Goicoechea
Nacemos con un sistema defensivo y un miedo muy desarrollado con dependencia del cuidador. Es fácil que se escapen excesos de miedos expresados con lloro o queja.
Si desde la infancia nos empiezan a describir el significado de dolor, dando siempre pie a una intervención exterior principalmente con fármacos, el niño va a desarrollar una facilitación de la queja para conseguir la resolución del malestar.
“Las mejores herramientas para un paciente son las que se desprenden de la comprensión del proceso. Es más importante saber qué tienen que comprender, que qué tienen que hacer”
Arturo Goicoechea
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